Cuando todo es uno y uno es todo

Tenía una difícil decisión que tomar, dejar de desear tener una familia, un matrimonio, un futuro o seguir amando al insufrible hombre con el que estaba. Hace unos años le hubiera puesto en pendientes para después, pero hoy era después.
Él seguía siendo un niño, un pequeño asustado, miedoso de las responsabilidades y de él mismo.
Entonces, sentía el dolor en el pecho, las lagrimas, la negación, ni siquiera soportaba la idea de dejarlo ¿Cómo podría hacerlo? como si no podría amar de nuevo, no después de él.

Raise your glass!!!!

Ultimamente traigo esta canción en mi cabeza...y como siempre no se ni que hacer, y dejar de hacer, estoy con si empiezo o no la maestría, mi trabajo esta estancado, al menos mañana se pronostica una buena pelea con los directivos, a ver que pasa, mientras yo ya estoy mentalizada para hundirme con mi barco, digo con mi archivo, pero esperamos no llegar a tanto, el extrañamiento de amigos ya no es tanto, el extrañamiento y cariño del novio tampoco, no se si he llegado a un punto en que ya no me importa o que veo que ahí están. O si se van que estaremos en contacto. Los lazos que se unen pierden importancia, los años aumentan, las deudas también, las risas disminuyen, la fe crece y el futuro siempre es desconcertante. Pero por primera vez eso esta bien, ahora solo quiero aprender cosas nuevas y tener tiempo para hacerlo. Saludines!!!!